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La preparación en el punto de mira de las nuevas normas de la INACSL

Normas de buenas prácticas en simulación sanitaria

Mejor preparación = mejor formación

La experiencia es una parte importante de la destreza y el dominio de cualquier labor. La formación mediante simulación en el ámbito sanitario permite al personal médico adquirir una experiencia muy valiosa y perfeccionar las técnicas para salvar vidas. Aunque, con la práctica, la eficacia de la formación mediante simulación está directamente relacionada con la norma y sus directrices.

Para cumplir esta misión, la Asociación Internacional de Enfermería para la Simulación y el Aprendizaje Clínicos (INACSL) ha desarrollado (y actualiza continuamente basándose en la evidencia de la cuarta edición recientemente publicada) buenas prácticas para que la simulación sanitaria prospere.

Como recurso global, estas normas están traducidas a varios idiomas y pueden adaptarse fácilmente para la disponibilidad de recursos.

Cambios en las directrices

La pandemia mundial y los nuevos desarrollos en el ámbito técnico y médico han exigido una rápida adaptación. Para empezar, las normas han sufrido un cambio de nombre y, a partir de ahora, se conocerán como Healthcare Simulation Standards of Best Practice (Normas de Buenas Prácticas de Simulación Sanitaria).

Este cambio pone en relieve el desarrollo profesional y la información previa, y actualiza el diseño de la simulación, la facilitación, el debriefing, las operaciones, los resultados y los objetivos, la integridad profesional, la educación interprofesional (IPE) mejorada con simulación y la evaluación del aprendizaje y el rendimiento.

Las normas constan de diez medidas, cada una de las cuales es clave para garantizar la máxima fidelidad en las experiencias basadas en simulación (SBE), respectivamente. Sin embargo, en este artículo se examinarán tres que destacan por ser especialmente cruciales en lo que respecta a la preparación para la formación con simulación. Los alumnos mejor preparados se benefician aún más de las SBE y adquieren conocimientos que ayudarán a salvar vidas.

La norma establecida por la INACSL también sugiere que la organización y la adaptabilidad son elementos vitales en el entorno de la simulación. Los profesionales deben tener en cuenta que «las experiencias basadas en la simulación requieren una planificación decidida y sistemática, aunque flexible y cíclica».

A continuación verá una adaptación de las normas de la INACSL, que pueden consultarse íntegramente íntegramente aquí.

1. Organización y adaptabilidad

El primer criterio de la norma destaca el impacto que tiene la organización y la adaptabilidad  en la simulación. La falta de recursos se supera a través de un desarrollo profesional deliberado y sistemático, haciendo uso de los contactos. El SBE debe diseñarse de la mano de expertos en contenidos y  en simulación conocedores de las buenas prácticas en educación, pedagogía y simulación.

Elementos necesarios para cumplir este principio:

  • Los diseñadores de simulación deben tener una formación formal o informal en pedagogía y prácticas de simulación.
  • Los métodos sugeridos para desarrollar la competencia incluyen (pero no se limitan a):
    • Afiliarse a organizaciones profesionales de simulación.
    • Incorporación de Healthcare Simulation Standards of Best PracticeTM (HSSOBPTM).
    • Estudio y revisión de la literatura.
    • Tutorías y networking.
    • Cursos o certificaciones formales.
    • Asistencia a conferencias o talleres sobre simulación.
    • Ofertas de formación continua centradas en la pedagogía o la andragogía.
  • Estar informado de las normas éticas de las experiencias basadas en simulación y adherirse al código de ética de los simuladores sanitarios (Seguir la integridad profesional de las normas HSSOBPTM).
  • Los expertos en contenido deben tener un conocimiento general de los principios de diseño de simulación y escenarios, métodos de debriefing y enfoques de evaluación.
  • Seguir el desarrollo profesional de las HSSOBP™

 

2. Utilizar la fidelidad para crear realismo

Al recurrir a líderes de opinión para fomentar el desarrollo profesional, también aumenta la autenticidad de la práctica. Una formación más cercana a la experiencia real de tratar a un paciente conduce a una mejor preparación. Lo que se detalla específicamente en el sexto criterio de la norma: Utilizar varios tipos de fidelidad para crear la percepción de realismo requerida.

Elementos necesarios para cumplir este principio:

  • Diseñar la simulación prestando atención a los aspectos físicos, conceptuales y psicológicos de la fidelidad que pueden contribuir a la consecución de los objetivos. Específicamente, esto se refiere menos a la "realidad" específica y, en cambio, debe centrarse en la representación de los estímulos y las señales que normalmente estarían presentes para impulsar la toma de decisiones y la acción. Estos aspectos de la fidelidad deben considerarse desde la perspectiva de los alumnos.
    • La fidelidad física (o del entorno) depende del grado de realismo del contexto físico de la actividad basada en la simulación en comparación con el entorno real en el que se produciría la situación en la vida. La fidelidad física incluye factores como los pacientes, el simulador/maniquí, el paciente estandarizado, el entorno, el equipo, los actores incorporados y los accesorios relacionados.
    • La fidelidad conceptual garantiza que todos los elementos del escenario o caso se relacionen de forma realista entre sí, de modo que el paciente tenga sentido como un todo para el alumno (por ejemplo, que las constantes vitales sean coherentes con el diagnóstico). Para maximizar la fidelidad conceptual, los casos o escenarios deben revisarse por los expertos en contenido, y probarse antes de usarlos con los alumnos.
    • La fidelidad psicológica maximiza el entorno de simulación imitando los elementos contextuales que se encuentran en los entornos clínicos. Algunos ejemplos incluyen una voz activa para los pacientes para permitir una conversación realista, el ruido y la iluminación normalmente asociados con el entorno simulado, las distracciones, los miembros de la familia, otros miembros del equipo de atención sanitaria, la presión del tiempo y las prioridades contrapuestas. La fidelidad psicológica funciona en sinergia con la fidelidad física y conceptual para fomentar la participación del alumno.
    • Desarrolle la simulación utilizando los tipos de fidelidad adecuados que creen la percepción de realismo necesaria para que los alumnos se comprometan de manera pertinente.
    • La fidelidad también debe desglosarse para centrarse en el paciente, la instalación y el escenario. Este marco se utilizaría junto con los conceptos de fidelidad física, conceptual y psicológica a fin de optimizar la fidelidad en cada elemento de la simulación.
  • Cuando sea pertinente, utilice la técnica de moulage para replicar rasgos o características de la situación del paciente y, cuando sea posible, seleccione maniquíes que representen respetuosamente la raza y la cultura de los pacientes en el escenario para fomentar las percepciones sensoriales de los alumnos y apoyar la fidelidad del escenario.
  • Es importante reiterar la distinción entre fidelidad y funcionalidad o tecnología. Estos términos son independientes el uno del otro y deben seguir siéndolo. Tecnología no equivale necesariamente a una alta fidelidad, y cualquier modalidad sencilla (maniquí, dispositivo de entrenamiento de tareas, etc.) puede o no ser de alta fidelidad sin necesidad de advertirlo. No toda simulación requiere la máxima fidelidad de realismo. Las determinaciones sobre el grado de fidelidad y la aplicación de esta fidelidad deben determinarse mediante el examen de varios factores. Estos factores pueden ser, entre otros:
    • Nivel del alumno
    • Objetivos de aprendizaje
    • Tiempo y recursos disponibles
    • Equipos disponibles
    • Resultados de aprendizaje deseados
    • Relevancia clínica

 

3. Preparación adecuada

Dado que el entorno de simulación ideal se diseña mediante la consulta a expertos, es muy posible que los alumnos y otros profesionales menos experimentados se sientan abrumados. Es importante contar con la preparación adecuada, y familiarizarse tanto con el entorno como con la metodología es crucial para que la simulación y el entorno de aprendizaje sean positivos. Esta necesidad se refleja en el octavo criterio: Crear un plan de prebriefing que incluya materiales de preparación y una sesión informativa para orientar el éxito de los participantes en la experiencia basada en la simulación.

Elementos necesarios para cumplir este principio:

  • Desarrollar el prebriefing de acuerdo con el propósito y los objetivos de aprendizaje de la formación basada en simulación.
  • Tener en cuenta la experiencia y el nivel de conocimientos de los participantes en la simulación al planificar el prebriefing.
  • Desarrollar materiales de preparación para asegurar que los participantes estén capacitados para la experiencia y puedan cumplir con los objetivos del escenario o del procedimiento, basándose en la evaluación de las necesidades y el propósito de la experiencia.
  • Transmitir a los participantes información importante sobre las expectativas, los programas y la logística antes de comenzar la simulación.
  • Llevar a cabo una preparación estructurada sobre el entorno de aprendizaje incluida la funcionalidad.
  • Establecer un entorno de aprendizaje psicológicamente seguro durante el prebriefing.
  • Seguir el prebriefing HSSOBP™: Preparación y briefing

En todas las normas de la ciencia no hay garantía sin error y prueba. Es vital que las instituciones hagan uso de recursos públicos, como la INASCL, así como de entidades privadas, para preparar sus laboratorios de simulación para el aprendizaje. Planificar en colaboración con el asesoramiento de expertos, centrarse en la autenticidad de la simulación y el prebriefing proporcionan a los alumnos las mejores posibilidades de éxito en el aprendizaje por simulación.

 

Acerca de la INACSL

La Asociación Internacional de Enfermería para la Simulación y el Aprendizaje Clínicos (INACSL) es líder mundial en la transformación de la práctica para mejorar la seguridad del paciente a través de la excelencia en la simulación en atención sanitaria. La INACSL es una comunidad de práctica para la simulación en la que los miembros pueden establecer una red con líderes de simulación, educadores, investigadores y socios de la industria. La INACSL también proporciona las normas de buenas prácticas de la INACSL: Simulación, un marco basado en la evidencia para dirigir el diseño de la simulación, implementación, debriefing, evaluación, e investigación.